“Ya no quiero emprender por ensayo y error. Quiero conocer el mercado antes de invertir.” Esta frase es con la que empresarios experimentados nos buscan para ayudarles con el análisis de mercado de los nuevos proyectos que traen. También, afortunadamente, hay empresarios noveles que nos buscan con ese objetivo: conocer su mercado antes de invertir; sin embargo, esto no es lo más frecuente.
El INEGI desarrolló durante el 2015 y el 2018 una encuesta llamada ENAPROCE (Encuesta Nacional sobre Productividad y Competitividad de las Micro, Pequeñas y Medianas Empresas). Uno de los aspectos analizados es que apenas el 10% de los emprendimientos surgen por haber descubierto una oportunidad de negocio. Este factor seguramente incide en otra estadística de larga historia que maneja INEGI, en la que evalúa que uno de cada 2 emprendimientos cierra en el 2º año.
Cuando se piensa en investigar el mercado, una idea común es pensar en levantar encuestas, hacer entrevistas u otros medios de obtención de información de mercado. Estas herramientas conforman lo que se conoce como investigación primaria (investigación a través de levantamientos de información). Sin embargo, por la mecánica de elaboración de estos estudios, parten de una definición de perfil de consumidor potencial a evaluar. Esto puede generar sesgos de confirmación, en el sentido de validar al mercado que ya se tenga previamente identificado, sin saber si ese nicho pensado es el más atractivo, la evolución que ha tenido, o descartando la posibilidad de descubrir otros.
Por ello existe otro conjunto de herramientas de investigación conocidas como secundarias, que consisten en la explotación de datos ya recopilados, con la posibilidad de ir de una visión general a la particular para descubrir distintos perfiles de clientes potenciales, así como entender sus evoluciones históricas. Son poco conocidas, pero en México contamos con un conjunto muy valioso de bases de datos confiables en temas económicos y sociales que permiten tener una visión clara del:
Tamaño y evolución del mercado.
Nichos de clientes potenciales y sus importancias relativas.
Cambios en patrones de consumo.
Distintos contextos competitivos en el país (alineación o desalineación entre la oferta y la demanda potencial).
Estas herramientas dan una visión con fuerte sustento metodológico y en cortos tiempos, y dado que los tiempos y recursos involucrados son menores, a costos menores. Son las mejores herramientas para conocer un mercado, que podrán ser complementados, eventualmente, con estudios primarios (los más conocidos) una vez que se logra perfilar y dimensionar nichos de interés.
Contamos con diversos modelos de análisis que hemos aplicado a mercados industriales, comerciales y de servicio. Dentro de los casos más recientes, hemos ayudado a nuestros clientes a conocer el tamaño, perfiles y evolución de mercados como:
Tratamientos faciales de alta gama.
Productos para mascotas.
Casas de atención de personas mayores.
Servicios de tecnología de información.
Desarrollos de vivienda y de plazas comerciales.
Son reportes que se generan en el lapso de 2 a 3 semanas, y que permiten orientar la toma de decisiones sobre cómo arrancar el emprendimiento o, inclusive, decidir su replanteamiento.
Contáctanos, podemos apoyarte a tener un arranque muy sólido de tus emprendimientos. Escribe a contacto@atalaya.info o llama al (442)732-1011.