Ajustes de presupuesto en empresas a mitad de año: cómo tomar el timón a tiempo

A mitad de año, las empresas se enfrentan a una realidad clave: el plan presupuestal elaborado a principios del año ya no necesariamente refleja la situación actual. Cambios en el mercado, comportamiento inesperado de los clientes, incrementos en los costos o desviaciones operativas pueden poner en riesgo los objetivos financieros establecidos. Por ello, realizar ajustes de presupuesto oportunos es esencial para retomar el rumbo y cerrar el año con cifras saludables.

El primer paso consiste en hacer un corte de caja: comparar los ingresos y egresos reales contra lo proyectado. Esta evaluación permite detectar desviaciones críticas, categorías con sobregasto, ingresos por debajo de lo esperado o rubros sin ejecución.

Posteriormente, es recomendable reunir a los responsables de cada área para revisar estos hallazgos y tomar decisiones informadas. En algunos casos, será necesario recortar gastos no prioritarios; en otros, reorientar inversiones a proyectos de mayor impacto o incluso aumentar presupuestos en rubros que han demostrado alta rentabilidad.

Este ejercicio también es una oportunidad para revaluar metas. Si el entorno cambó, también deben cambiar los objetivos. No se trata de rendirse, sino de adaptarse con inteligencia para mantener la viabilidad financiera.

Un ajuste presupuestal no es una señal de fracaso, sino una muestra de madurez empresarial. Las organizaciones más exitosas no son las que nunca fallan en sus proyecciones, sino las que tienen la agilidad para corregir el rumbo cuando es necesario.

Fuente: Deloitte (2023). Mid-Year Budget Reviews: A CFO Guide. https://www2.deloitte.com