Definir el mercado objetivo para tu negocio es una tarea fundamental para asegurar el éxito de tu empresa. Por eso, es importante que te tomes el tiempo necesario y lo hagas de forma estructurada.
En este artículo, te explicamos los pasos a seguir para definir y segmentar tu mercado objetivo.
Recopila información sobre tus clientes: Los primeros pasos para definir tu mercado objetivo son recopilar información sobre tus clientes actuales y potenciales. Esto te ayudará a entender quiénes son, qué necesidad cubre tu producto, cuáles son los motivos reales por los cuales compran tu producto y no otro, así como los principales criterios de segmentación. Para ello, puedes usar herramientas como tu CRM de ventas, los reportes de ventas generados por tu software de soporte, las redes sociales y Google Analytics.
Analiza a la competencia: Mira a tu competencia y descubre datos interesantes sobre lo que funciona y lo que no. Esto te puede ayudar a identificar segmentos que tal vez no habías considerado. Esto puedes hacerlo a través de identificar a los competidores en los distintos mercados en los que estás, su perfil por tamaño, evolución en el tiempo, y la oferta con base en la información de sus páginas. Todas estas son herramientas de investigación secundaria que pueden dar mucha información en poco tiempo y con bajas inversiones.
Ponte en los zapatos de tus clientes: Es momento de ponerte en los zapatos de tus clientes para entender sus necesidades y expectativas. Considera sus posibles objeciones y analiza qué puede ayudarte a construir o ajustar la oferta de valor enfocada a tu mercado objetivo. Siempre es importante contar con una oferta que aporte valor a tu cliente, mucho más en tiempos económicos de bajo crecimiento y alta inflación, como los que vivimos ahora. Si descubres que en tu oferta no tienes realmente algo que aporte valor a tu cliente, desarróllalo.
Construye el perfil de tu cliente: Con la información obtenida, haz una descripción completa de tu mercado objetivo. Hazlo con el mayor detalle posible y de acuerdo con los criterios de segmentación. Un ejemplo de mercado objetivo puede ser: Género, edades, ubicación geográfica, interés en actividades, hobbies y estilo de vida. Para empresas puede ser ubicación, actividad, tamaño. Recuerda que este perfil debe actualizarse constantemente.
Realiza pruebas: Una vez definido tu mercado objetivo, realiza pruebas para garantizar que sea correcto y para identificar posibles oportunidades. Mira la efectividad de la publicidad en los diferentes canales, especialmente en redes sociales donde puedes hacer una segmentación más específica. Revisa el desempeño de tus ventas en ese mercado que definiste como el objetivo, y compara con el total de tu cartera, para identificar los cambios que tengas que hacer.
Con estos consejos, estamos seguros de que lograrás definir tu mercado objetivo de forma exitosa. Esto te permitirá construir relaciones duraderas con tus clientes basadas en el entendimiento de sus necesidades y expectativas. ¡A construir tu negocio!
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