Recientemente, un cliente de muchos años nos pidió que revisáramos los estados financieros de 2023. Con anterioridad, nos había pedido lo mismo, por lo que teníamos referencias del ritmo de crecimiento y estructura financiera de su empresa.
Al hacer el análisis de este año, la historia fue muy distinta a años anteriores: la utilidad acumulada a julio era prácticamente cero, situación que mejoró en los 5 últimos meses del año. Aun así, los resultados totales del año, en términos de las ventas y la utilidad fueron los de peor desempeño en todos sus años de operación.
Al mostrar los resultados, presentamos que había otros indicadores que señalaban comportamientos fuera de parámetros: el promedio de ventas mensual, y el margen bruto, variable del que además contamos con benchmarks de la industria, y aunque siempre se muestran en un rango cercano, ahora era muy distante.
El director nos comentó que habían tenido “inconvenientes” durante esa primera mitad del año. Al ver ellos también que tenían un mal desempeño financiero, realizaron una serie de investigaciones internas que les llevó a descubrir a un grupo de empleados que estaban haciendo un mal manejo de recursos de la empresa: tenían operaciones comerciales por fuera de la empresa, usando materiales y recursos de la misma. Finalmente, fueron despedidos las personas involucradas, y es cuando se comenzó a ver la recuperación financiera.
Aunque los estados financieros reflejan hechos pasados, analizarlos mensualmente, con la mayor oportunidad posible (dentro de la 1ª quincena del mes siguiente), y seleccionando adecuadamente indicadores clave, te ayudará a detectar con mayor oportunidad desviaciones que pueden significar problemas operativos y de gestión.
Para lograr esto, es importante:
Que tengas un buen entendimiento histórico de la estructura financiera de tu empresa, para que sirva como marco de referencia.
Que identifiques con claridad los criterios del contador en el registro de las operaciones en tus estados financieros, para traducir los números a decisiones y eventos de negocio claramente identificados.
Que le des continuidad a este ejercicio de análisis de forma mensual, para identificar con mayor oportunidad las desviaciones y recordar más fácilmente qué eventos relevantes ocurrieron.
Que evalúes las variables clave a monitorear en tu empresa. Esas pueden variar en el tiempo, acorde a las circunstancias, pero es importante enfocarte sólo en unos cuantos indicadores clave. Hemos visto ejercicios de este tipo donde se calculan arriba de 20 razones financieras, muchas que no representan algo significativo, y hacen que este ejercicio se vuelva repetitivo y estéril (por algún motivo, muchos calculan la “prueba ácida” como un indicador relevante, cuando comúnmente reflejará.
Sí, la información financiera, aún diseñada con criterios contables y sabiendo que reflejan comportamientos pasados, pueden ser de gran utilidad para la toma de decisiones directivas si se entiende cómo se reflejan las decisiones de negocio y las variables operativas en esos números.
Contáctanos para trabajar en el modelo de análisis financiero más adecuado para tu empresa, y comenzar con este ejercicio que te dará visibilidad muy cercana a banderas rojas, ante las cuales actuar, o a banderas verdes, que son importante mantener. Escribe a contacto@atalaya.info o llama a (442)732-1011.
Comments